Todos sabemos aquello de que la edad no perdona, y lo cierto es que, conforme vamos cumpliendo años, cada vez es más habitual que observemos sensación de cansancio o incluso se desarrolle un cansancio excesivo en personas mayores. Vamos a intentar determinar cuáles son los síntomas más frecuentes en estos casos, las causas por las que se puede desarrollar este problema y los diferentes tratamientos que dependerán de las razones por las que se haya producido.

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Síntomas del cansancio en personas mayores

Es importante entender que existen dos tipos de cansancio en personas mayores que son los siguientes:

• Cansancio físico: se puede identificar a partir de la aparición de debilidad, tensión muscular o dolor que se produce tras la realización de una actividad física o un sobreesfuerzo.
• Cansancio mental: también conocido como cansancio psicológico, el cual se produce en el momento en el que comenzamos a tener dificultad a la hora de concentrarnos así como para realizar diferentes tipos de actividades intelectuales con normalidad.

Es muy importante prestar atención a los principales síntomas que pueden mostrar la presencia de cansancio excesivo en personas mayores, entre los cuales destacamos:

Causas del cansancio en personas mayores

Existe un amplio abanico de causas por las que se puede desarrollar el cansancio en personas mayores, entre las cuales destacamos las siguientes:

• Medicamentos: hay determinados tipos de medicamentos que pueden producir cansancio y fatiga como son los medicamentos para controlar el colesterol, los utilizados para los problemas de hipertensión arterial, los esteroides, antidepresivos, ansiolíticos e incluso los antihistamínicos.
• Falta de descanso: generalmente se produce por problemas de sueño en los ancianos, lo cual hace que la persona no duerma el tiempo necesario, sintiéndose más cansada a lo largo de todo el día. En estos casos es importante evitar el consumo de alcohol y cualquier otro tipo de bebida estimulante, utilizar ropa cómoda hará dormir, establecer un adecuado horario para el sueño y conseguir que la habitación esté a una temperatura adecuada.
• Nutrientes: las personas mayores tienen una mayor predisposición a sufrir carencia de nutrientes que pueden dar lugar a la sensación de fatiga como son el hierro, el ácido fólico, la vitamina B12 y la vitamina D.
• Anemia: la anemia se puede producir por falta de hierro, por una pérdida de sangre o por una enfermedad renal, di lo que produce es una bajada en el nivel de glóbulos rojos, lo cual hace que el transporte de oxígeno sea insuficiente, generando la sensación de cansancio.
• Problemas cardíacos: problemas como la insuficiencia cardíaca hacen que el corazón sea menos eficiente a la hora de bombardear sangre, lo que reduce la llegada de oxígeno al corazón y al resto del cuerpo.
• Problemas pulmonares: la enfermedad pulmonar obstructiva crónica y el asma son dos de las principales enfermedades pulmonares que pueden reducir el reparto de oxígeno por el organismo.
• Depresión: la depresión es una enfermedad que hace que cualquier tarea sencilla suponga un esfuerzo mucho mayor.

Tratamiento para el cansancio

Existen diferentes tipos de tratamiento para el cansancio en personas mayores en función de las razones por las que se produce, entre los cuales encontramos:

• Es importante que la persona duerma ocho horas diarias.
• Con la edad es normal que haya tareas que puedan resultar más difíciles como cocinar o limpiar entre otras, en cuyo caso las deberá delegar, para lo cual se recomienda la contratación de una empresa de servicio doméstico.
• Es aconsejable que cene de forma ligera.
• El desayuno es imprescindible.
• También deberá fomentar el consumo de frutas y verduras frescas.
• La hidratación es esencial para evitar el cansancio, de manera que deberá beber alrededor de 2 l de agua al día.
• Organizar bien el día a día es una buena forma de administrar las fuerzas y evitar el cansancio.
• El sedentarismo es uno de los peores enemigos del bienestar, por lo que es importante que practique ejercicio físico de manera regular.
• También se recomienda que cada día pueda dedicar un rato a descansar y relajarse.
• Al levantarse y antes de acostarse deberá realizar ejercicios de respiración para mejorar la oxigenación de su cuerpo.

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